Se sentó frente a la pantalla y se dispuso a releer lo que había escrito la noche anterior. Abrió el archivo de texto y comenzó a hacerlo. Era una historia de amor breve:
El noble joven se paró frente al apuesto y corpulento hidalgo,
los cambios se hacían presentes, nada sería como antes era,
se abalanzó hacia él, decidido y con velocidad, y se abrazaron.
Una puñalada directa al corazón, desgarradora y letal para el alma,
fue el fin de la contienda, la triangulación amorosa y el juego de celos.
El caballero de cabellos rubios, elegante, valiente y refinado,
vio con un profundo dolor como perdía al amor y su vida.
La disyuntiva había terminado, el príncipe se quedaría con
la bella princesa, quien había esperado la decisión, sintiendo
una experiencia maravillosa e increíble, nunca antes vivida,
Se besaron en los labios y se alejaron tomados de las manos.
Terminó la lectura y frunciendo el ceño, dijo imperativamente:
- ¡El que escribe soy yo, por lo tanto el que manda! Acá no tiene cabida la anarquía, yo soy el jefe por lo que les ordeno que vuelvan a estar como las creé. –
Por miedo, por falta de convicción y por no tener una líder, la revolución de las líneas llegó a su fin. Todas cambiaron su lugar por el original.
El hombre leyó nuevamente el texto:
La bella princesa, quien había esperado la decisión, sintiendo
una puñalada directa al corazón desgarradora y letal para el alma,
vio con un profundo dolor como perdía al amor y su vida.
La disyuntiva había terminado, el príncipe se quedaría con
el caballero de cabellos rubios, elegante, valiente y refinado.
Fue el fin de la contienda, la triangulación amorosa y el juego de celos.
El noble joven se paró frente al apuesto y corpulento hidalgo,
se abalanzó hacia él, decidido y con velocidad, y se abrazaron.
Se besaron en los labios y se alejaron tomados de las manos,
una experiencia maravillosa e increíble, nunca antes vivida
Los cambios se hacían presentes, nada sería como antes era.
Ahora sí, pensó, así es.
El noble joven se paró frente al apuesto y corpulento hidalgo,
los cambios se hacían presentes, nada sería como antes era,
se abalanzó hacia él, decidido y con velocidad, y se abrazaron.
Una puñalada directa al corazón, desgarradora y letal para el alma,
fue el fin de la contienda, la triangulación amorosa y el juego de celos.
El caballero de cabellos rubios, elegante, valiente y refinado,
vio con un profundo dolor como perdía al amor y su vida.
La disyuntiva había terminado, el príncipe se quedaría con
la bella princesa, quien había esperado la decisión, sintiendo
una experiencia maravillosa e increíble, nunca antes vivida,
Se besaron en los labios y se alejaron tomados de las manos.
Terminó la lectura y frunciendo el ceño, dijo imperativamente:
- ¡El que escribe soy yo, por lo tanto el que manda! Acá no tiene cabida la anarquía, yo soy el jefe por lo que les ordeno que vuelvan a estar como las creé. –
Por miedo, por falta de convicción y por no tener una líder, la revolución de las líneas llegó a su fin. Todas cambiaron su lugar por el original.
El hombre leyó nuevamente el texto:
La bella princesa, quien había esperado la decisión, sintiendo
una puñalada directa al corazón desgarradora y letal para el alma,
vio con un profundo dolor como perdía al amor y su vida.
La disyuntiva había terminado, el príncipe se quedaría con
el caballero de cabellos rubios, elegante, valiente y refinado.
Fue el fin de la contienda, la triangulación amorosa y el juego de celos.
El noble joven se paró frente al apuesto y corpulento hidalgo,
se abalanzó hacia él, decidido y con velocidad, y se abrazaron.
Se besaron en los labios y se alejaron tomados de las manos,
una experiencia maravillosa e increíble, nunca antes vivida
Los cambios se hacían presentes, nada sería como antes era.
Ahora sí, pensó, así es.
Me gusta la versión segunda, la del amor entre los dos apuestos, jejeje y la princesita, probrecita, difunta. Es la anarquía dentro de lo que supuestamente tendría que ser el final esperado, pero, Gambetas, !qué hermoso amor entre hombres! nada raro, posible.
ResponderEliminarTe aplaudo sinceramente, el triángulo se rompió gracias a tu mágica anarquía !abajo los finales previsibles! Perfectamente perfecto desde todos los ángulos. Besitooos.
Imaginativo y dificil ejercicio de trabajo literario para gestar dos historias con las mismas frases. Fantástico.
ResponderEliminarHas dado otra vuelta a la tuerca que empezastes con "página 24 linea 3"
Un saludo
ja ja ja muy buen cambio si señor, anarquia total, porque tiene que ser un hombre que muera si hay un buen mozo por medio...ja ja ja
ResponderEliminarMe parto de risa con la tematica tan original que le has dado.
Primavera
Uhhh si las letras hicieran lo que quisieran y se acomodaran segun les diera la gana ... !!!
ResponderEliminarAunque en este caso se ve que las letras apuntaban a algo mas convencional. Menos mal que el escritor se impuso. A mi también me gusta mas la segunda versión. Que tal para cuento infantil? Hay que renovar un poco el stock de cuentos para niños ...
;)
VIVA LA ANARQUÍA QUE RESULTÓ DE LAS ORDENES DEL ESCRITOR... o no...VIVA EL ESCRITOR QUE NO DEJO QUE LAS LETRAS SE ANARQUIZARAN Y RESULTÓ UN ESCRITO ENCANTADOR (claro, no en un sentido tradicional, pero qué mejor que innovar?)
ResponderEliminarVUENIZIMO!!!
besotes
Ah! Qué bueno! Qué va a ser esto de no tener un líder y que los personajes se desmelenen sin tener en cuenta al dueño de la pluma? Jaja.
ResponderEliminarBravo, amigo!
Buen juego de frases intercambiables, y un final feliz distinto, pero precisamente por eso, muy de agradecer.
ResponderEliminarMuy bien jugadas estas cartas.Cuando lo previsible era de esperar,quien maneja la realidad a su antojo define barajar y empezar de nuevo para que esto se haga un tanto mas imprevisible.
ResponderEliminarAlla estaba la flor,ahora aqui cerca le sumo fragancia.
bien armado este puzle
corfial saludo
La verdadera anarquia estriba en que el escritor ha sido capaz de concebir dos desarrollos tan dispares con la misma situacion y los mismos personajes. El segundo de ellos, sin ninguna duda, es mucho mas "jugoso" por lo imprevisible.
ResponderEliminarUn abrazo.
Jajaja Gambetas no dejas de sorprenderme, desde luego que el final de la primera historia era de esperar pero si algo me excita frente a la lectura es desconocer el final. Muy buen texto. Un beso grande.
ResponderEliminarMuy bueno, sorprendente y divertido. Me has provocado una risotada en voz alta.
ResponderEliminarUn saludo.
la mama que tepario, gambetas de lana....
ResponderEliminarla anarquia estaba en e libro, en la ida del libro, la anarquia de las palabras...viva la vida de las palabras, viva la vida de las palabras que se apean de las ordenes del escribano, del escribiente, del escribidor...viva el mundo d elas palabras autonomas...
sabes, gambetas d elana?, es una tarea dificil, para mi imposible, el hacer doblar el sentido de las plabras una vez que me pongo a escriir un minirelato...siempre suelñe ellas salirse por...suelen ellas irse, tomar el camino que les da la gana...me suelo convertir en un mero escribidos, en un mero formalizador de sus significados, soy un simple pintos de sus grafias, de sus formas...asi que en mi esa anarqui se da, en mi suele acaecer que son ellas las dueñas...sí, pongo la idea, mas son ellas las que la desarrollan...asi que esas palabras tuyas, anarquicas, creo que me soin muy conocidas...
viva la mama que te parioooo...
besos a humanos masculinos solo...jaajj
muy bueno Gambeta este juego a dos voces que nos traes en este anárquico jueves.
ResponderEliminarFelicidades
Besos